
La transición energética: ¿más que meras palabras?
Con las fechas límite de reducción de emisiones ya a la vista, están surgiendo señales de una transformación a largo plazo en el modo en que producimos, suministramos y consumimos energía. No obstante, múltiples personalidades y organismos reconocen que con esto no basta. Si ha llegado verdaderamente la era de la transformación energética, ¿cuál es el mejor modo de acceder a estas oportunidades como inversores?
Sobre todo, la AIE advierte de que, bajo los actuales planes gubernamentales de gasto de recuperación, las emisiones globales de carbono alcanzarán niveles récord en 2023 y continuarán subiendo. En opinión de sus expertos, el mundo se halla “lejos de la senda hacia la neutralidad de carbono de cara a 2050”2.
Aunque el tiempo apremia, todavía no es demasiado tarde para implementar los cambios necesarios, y la expectativa es que la próxima cumbre COP26 será crucial a la hora de elevar las ambiciones de todos los agentes para intensificar las medidas climáticas, crear resiliencia y reducir las emisiones. Alok Sharma, presidente del COP26, afirma que “no debemos perder de vista los enormes retos que plantea el cambio climático… estamos trabajando con nuestros socios internacionales en una ambiciosa hoja de ruta de acción climática global… y el COP26 puede ser un momento en que el mundo se una bajo una recuperación limpia y sostenible”.3
Un resultado positivo de estos trágicos eventos es que los políticos han pasado a reconocer públicamente la necesidad de hacer más para abordar el impacto del cambio climático y frenar su avance. La canciller alemana Angela Merkel ha instado a “intensificar la lucha contra el cambio climático”5, mientras que el presidente estadounidense Joe Biden reconoció que el «cambio climático está propiciando una peligrosa confluencia de calor extremo y sequías prolongadas”, añadiendo que “ahora tenemos que actuar con rapidez: se nos acaba el tiempo”.6
El último informe sobre calentamiento global del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC) de la ONU también confirma inequívocamente la realidad del cambio climático, advirtiendo de que este siglo se superará el nivel de calentamiento de 1,5 °C por encima de los niveles preindustriales a no ser que se produzcan reducciones profundas de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI)7. Esto llevó al Secretario General de la ONU, António Guterres, a describir este escenario como “un código rojo para la humanidad”8.
Este informe representa el primer estudio exhaustivo a nivel mundial de cómo puede lograrse la transición energética, ayuda a priorizar las medidas necesarias y define hitos para guiar el camino hacia la neutralidad de carbono. La declaración de la AIE de que “no debería invertirse en nuevos proyectos de suministro de combustibles fósiles”9 tuvo un impacto particularmente fuerte, al respaldar la financiación del ulterior desarrollo de fuentes renovables.
La oportunidad que ofrece la transición energética no se limita a la energía limpia. Después de todo, nadie espera que el uso de combustibles fósiles vaya a cesar de inmediato, y las fuentes convencionales siguen siendo una parte esencial del mix energético. De lo que se trata es de reducir la dependencia del mundo en los combustibles fósiles y adoptar progresivamente más fuentes de energía sostenibles y renovables.
Las oportunidades abarcarán innovaciones en redes inteligentes, transporte alternativo, vehículos eléctricos, eficiencia energética industrial, edificios verdes, iluminación LED, pilas de combustible de hidrógeno, energía eólica y fotovoltaica y numerosas áreas de suministro público. En este contexto, la transición energética debería verse como una oportunidad temática muy amplia.
En BNP Paribas Asset Management reconocemos la importancia de ser capaces de distinguir entre modas pasajeras y tendencias transformadoras y duraderas. Nos concentramos en investigar e identificar el futuro de la energía, de las fuentes renovables y de su impacto no solo en el sector energético, sino en un amplio abanico de áreas como el transporte y la vivienda. Creemos que esto requiere un conjunto diferente de preguntas. Al fin y al cabo, uno no puede tomar decisiones de inversiones bien fundadas si no adopta un enfoque sopesado, de miras amplias y sin sesgo alguno a la hora de evaluar el impacto y las oportunidades.
2https://www.iea.org/news/with-only-2-of-governments-recovery-spending-going-to-clean-energy-transitions-global-emissions-are-set-to-surge-to-an-all-time-high
3https://www.gov.uk/government/news/new-dates-agreed-for-cop26-united-nations-climate-change-conference
4https://www.ft.com/content/9a647a51-ede8-480e-ba78-cbf14ad878b7
5https://www.theguardian.com/world/2021/jul/18/angela-merkel-to-visit-flood-ravaged-areas-in-germany
6https://edition.cnn.com/2021/06/30/politics/wildfire-response-western-governors-biden-meeting/index.html
7https://www.ipcc.ch/report/ar6/wg1/downloads/report/IPCC_AR6_WGI_Headline_Statements.pdf
8https://www.un.org/press/en/2021/sgsm20847.doc.htm
9https://www.iea.org/news/pathway-to-critical-and-formidable-goal-of-net-zero-emissions-by-2050-is-narrow-but-brings-huge-benefits
10https://www.iea.org/news/pathway-to-critical-and-formidable-goal-of-net-zero-emissions-by-2050-is-narrow-but-brings-huge-benefits